La estación sísmica submarina más profunda del Mediterráneo instalada a más de 3,5 kilómetros de profundidad
En pleno mar Jónico, a más de 3400 metros de profundidad, un sofisticado sismómetro registra terremotos cercanos y lejanos. Integrado en la red INGV, reforzará la monitorización sísmica y el sistema de alerta de tsunamis para Italia y el Mediterráneo.

En octubre de 2024, se instaló el sismómetro más profundo del mar Mediterráneo, a más de 3.400 metros de profundidad (¡casi tres kilómetros y medio bajo el nivel del mar!). El instrumento se situó en un lugar remoto del mar Jónico, frente a la costa sureste de Sicilia, a 80 kilómetros al sureste de Portopalo di Capo Passero (Siracusa).
Ahora, como se indica en un artículo reciente del INGV (Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología), el instrumento está plenamente operativo e integrado en la red sismológica italiana.
La estación sismológica más profunda del Mediterráneo
La estación sismológica se instaló con éxito el pasado octubre a una profundidad de 3.443 metros en el mar Jónico, frente a la costa de Siracusa.
Se trata de una estación sismoacústica de alta sensibilidad, construida por un grupo multidisciplinar de investigadores del Instituto Nacional Italiano de Geofísica y Vulcanología (INGV) y del Instituto Nacional de Física Nuclear (INFN).
La stazione sismica sottomarina più profonda del Mediterraneo https://t.co/fGYk8K54Ts
— INGVterremoti (@INGVterremoti) April 15, 2025
La estación, construida en el marco del programa PON Marine Hazard - “Fondo de Desarrollo y Cohesión” para el período de programación 2014-2020, que incluyó la creación de un prototipo funcional gracias al trabajo del grupo de investigación involucrado, ha superado sus objetivos iniciales y ya se ha conectado con éxito a la gran infraestructura submarina KM3NeT/ARCA, el mayor telescopio de neutrinos abisales del mar Mediterráneo.
Los datos adquiridos se envían en tiempo real a los servidores de procesamiento del INGV, alojados en el Centro de Procesamiento de Datos de la sede operativa del INFN en Portopalo di Capo Passero, a través de un cable electroóptico submarino de aproximadamente 100 kilómetros de longitud.
“El despliegue de una infraestructura de esta envergadura representa un gran éxito, sentando las bases para la exploración continua de entornos considerados inaccesibles hasta hace unos años, con características únicas en su género”, comentó Sergio Scirè Scappuzzo, director científico del proyecto “Marine Hazard” del INGV.
Gianluca Lazzaro, tecnólogo del INGV, responsable del desarrollo e integración de la instrumentación científica, añade: «Este proyecto es fruto de una sinergia multidisciplinar y su éxito refuerza la colaboración científica y tecnológica entre el INGV y el INFN, y subraya la importancia de la cooperación entre las infraestructuras de investigación europeas, considerando también el apoyo recibido del EMSO ERIC».
Para crear este sofisticado observatorio científico, los investigadores del INGV en Palermo instalaron en la estación un sensor capaz de detectar tanto la conductividad como la temperatura de las masas de agua y la presión de la columna de agua superior, así como un hidrófono para el estudio de las bajas frecuencias de las ondas acústicas y un sismómetro marino de alta sensibilidad.
Por su parte, los investigadores del INFN-LNS diseñaron y construyeron la estructura de la estación, junto con la electrónica de control y transmisión de datos, así como los contenedores estancos para albergar la electrónica, resistentes a altas presiones.

«La instalación de esta estación refuerza los ya sólidos vínculos entre el INFN y el INGV y subraya la relación de plena interacción entre ambos institutos de investigación, además de aportar un mayor valor multidisciplinar a la excelencia científica que representa la infraestructura KM3NeT/IDMAR», declararon Simone Biagi, director del sitio KM3NeT/ARCA, y Angelo Orlando, coordinador técnico del proyecto de la estación.
Gracias al uso de tecnologías y competencias avanzadas, esta instrumentación proyecta la investigación hacia el estudio a largo plazo de las zonas más profundas de mares y océanos, que de otro modo serían escasamente observadas. Esto favorece la cohesión de una comunidad científica europea que aúna sus recursos y competencias, actuando además como motor de la transferencia de conocimiento y tecnología a las empresas italianas.
Una valiosa contribución a la sismología y la alerta de tsunamis
Gracias a su posición estratégica, la estación MHPPL representa una importante ampliación de la monitorización geofísica italiana. Se ubica en una zona sísmicamente activa, entre la escarpa íbleo-maltesa y el estrecho de Messina, escenario ya de importantes eventos como el terremoto de 1990 frente a la costa de Siracusa. Su presencia contribuirá a una mejor localización y análisis de los terremotos en esta zona fronteriza entre las placas africana y euroasiática.
Pero no solo eso. El sensor de presión absoluta instalado en el fondo marino permitirá próximamente la integración de la estación en el Centro de Alerta de Tsunamis del INGV, reforzando el SiAM, el sistema nacional de alerta de tsunamis sísmicos. Una pieza fundamental para la monitorización y la seguridad de las costas italianas y mediterráneas.
Referencias de la noticia
- La stazione sismica sottomarina più profonda del Mediterraneo - https://ingvterremoti.com/2025/04/15/la-stazione-sismica-sottomarina-piu-profonda-del-mediterraneo/